El vuelo
El vacío es evocador. Convoca memorias y los recuerdos construyen historias en la nada.
Alma Selena Miranda Villalba
El vuelo
La jovencita solía sentarse en el alfeizar, separada del abismo por la jardinera que lucía florecidos brotes rojos. Allí, con alas de libertad, alzaba el vuelo hacia el infinito sumida en la contemplación o sumergida en las páginas de los libros amados. Realizó innumerables viajes y visitó mundos extraordinarios recorriendo kilómetros de letras, antes de abandonar para siempre el cuerpo que la tuvo confinada por tanto tiempo en aquella pequeña y oscura habitación del segundo piso, en la antigua casa de sus padres. El vacío que reemplazó su imagen enmarcada por la ventana, aún evoca el recuerdo.
Alma Selena Miranda Villalba
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